Informe de Conducción Maserati Levante Q4 Diesel

El primer SUV de Maserati tiene poco menos de un año y medio. Y sigue impresionando sobre todo visualmente. El SUV de cinco metros de largo une el mundo crossover con el Gran Turismo y lo hace con una de las parrillas más grandes del mundo del automóvil. ¿Quieres comprar un coche de ocasión en Almería? En el concesionario de coches de segunda mano Crestanevada Almería podrás encontrar el coche de tus sueños al mejor precio.

 

Especialmente visto de frente, la cuestión no es lo grande que es el motor, sino más bien si hay que tener miedo a que se lo coman. El tridente está entronizado en el centro de la gran parrilla, definida únicamente por puntales verticales. No es precisamente adecuado para los suburbios, uno u otro niño ya podría desaparecer en él. En el Maserati Levante Q4 Diesel, un motor turbodiésel V6 de 3.0 litros fabricado por VM Motori funciona detrás de la parrilla. La potencia máxima de 275 CV rara vez se necesita, ya que se confía más en el par máximo de 600 Nm.

 

En general, el cambio automático de 8 velocidades está diseñado para trabajar con el par motor en lugar de cambiar de marcha a lo loco. La atención se centra en la compostura, incluso en el modo Sport. Se puede elegir entre dos niveles. En primer lugar, las características del motor y del acelerador. Luego, con un nuevo empujón, los amortiguadores también se vuelven un poco más firmes. Sin embargo, incluso en la configuración más deportiva, el Maserati Levante sigue siendo más un Gran Turismo y no se convierte en un deportivo. Para eso hay otros vehículos en este segmento.

 

Grande por fuera, pero más pequeño por dentro

 

En el interior hay espacio de sobra para cinco pasajeros, aunque la longitud de cinco metros y la distancia entre ejes de tres metros hayan creado la esperanza de disponer de más espacio para repartirse. En los sillones de cuero rojo, sin embargo, el viaje es ante todo el destino. Puedes llegar tranquilamente unas horas más tarde, todo invita a quedarse.

 

En resumen, Maserati no ha creado aquí un vehículo deportivo y puntiagudo, sino que ha trasladado el ADN de las berlinas y coupés al mundo SUV. Al menos el Levante Diesel se muestra como un compañero de viaje y menos como un depredador de curvas.