En verano de 2018, el Mazda6 experimentó su mayor lavado de cara desde el lanzamiento del modelo en 2013. El último modelo se reconoce sobre todo por la parrilla significativamente más grande y las salidas de escape, situadas más hacia fuera y con un diámetro mayor. Tras el modelo con motor de gasolina, el Mazda6 Estate Skyactiv-D 184, el nuevo diésel de 184 CV, ya está en el segundo informe de conducción.
El motor diésel revisado del Mazda6 Station Wagon
Al igual que el resto de motores, el diésel de 2,2 litros ha recibido más potencia gracias a su revisión interna. Los 135 kW / 184 CV son el «subproducto» de la cámara de combustión optimizada, de la nueva gestión térmica, pero sobre todo del uso del cargador VTG para el mayor de los dos turbos. Además, uno de los mayores problemas del Mazda6 se solucionó por fin con el lavado de cara del verano de 2018: con 320 milímetros, por fin hay discos de freno más grandes (delante).
El paquete Sports-Line Plus convierte al japonés en un competidor premium
La siguiente característica especial es el recién introducido paquete «Sports-Line Plus», que, además de cuero Nappa, también aporta al interior un fino acabado de madera japonesa y Alcántara. Al mismo tiempo, el precio del coche de pruebas sigue siendo agradablemente bajo, 43.740 euros. Se trata casi de un precio de ganga, lo que en este contexto plantea la pregunta de ¿por qué decantarse por una marca establecida?
Impresión de conducción del Mazda6 Estate Skyactiv-D 184
El motor es un placer de conducir, pero el automático es más recomendable. La caja de cambios manual es un poco rígida y, por tanto, priva al coche de parte de su placer de conducción diario. No obstante, gana puntos con su agradable bajo consumo de prueba de 5,0 a 6,1 l/100 km, que es un valor razonable para un vehículo de gama media en viajes largos y cortos. Esto se debe a que también se incluyen los trayectos rápidos por autopista. Más información en nuestro reportaje de vídeo.
Especialmente en viajes largos, el Mazda6 es ahora mucho mejor. La razón son los nuevos asientos, mucho más anchos. Gracias al bajo peso en orden de marcha de 1.566 kilogramos y al GVC bien implementado, los brazos nunca se cansan. Se ha convertido en un auténtico cowboy de autopista, y gracias a la potencia ahora adicional en comparación con su predecesor, tampoco en este aspecto es inferior a los modelos establecidos. ¿Un coche de ocasión? Elige entre los miles de coches de segunda mano en Crestanevada.