En el momento de la inscripción en un gimnasio, mucha gente se asuste por la carga de trabajo establecida por los instructores, en especial con respecto al periodo de adaptación en el inicio, cuando los músculos están muy lejos de la forma óptima.
También está claro que cualquier entrenador personal obligará a someterse a este ejercicio, o a otros, ya que es claro que un buen instructor es capaz de determinar cuál es el límite para cada estudiante. Sin embargo, para superar el miedo de las primeras sesiones de gimnasio se puede optar por losintervalos de entrenamiento, sea cual sea la disciplina que se ha elegido para la práctica.
El entrenamiento de intervalos es una técnica que le permite cambiar entre las diferentes intensidades de trabajo para alternar entre las etapas difíciles y las fases de trabajo de baja intensidad, por lo que el cuerpo puede recuperarse del esfuerzo realizado.
La práctica de una disciplina con el entrenamiento de intervalos no significa que no sea una fase de entrenamiento intenso, sino más bien someterse a un ejercicio menos vigoroso y útil por igual.
Tomemos un ejemplo, sólo para aclarar el tema: el entrenamiento de intervalos aplicado a una carrera, se corre en una fase de entrenamiento a un ritmo rápido, alternando con una segunda fase en la que la mayoría opta por un movimiento más ligero o dar un paseo.
Lo importante es que los músculos se mantiengan en movimiento, incluso durante la “pausa”. Lo mismo se puede aplicar a diferentes disciplinas, tales como natación, ciclismo, levantamiento de pesas y así sucesivamente.